A Night in the Olympic Museum
Last night, the presentation in the Olympic Museum of Barcelona was wonderful. There was a full house, and the mood was high with celebration. Thanks to all of you for your presence, your joy and support made sure that I’ll never forget the evening. As I said yesterday, we’ve now shared many of my ultra endurance adventures, and now it’s time to share this literary one – I hope you enjoy it.
I saw many familiar beloved faces there, but also had the pleasure of seeing and meeting some new ones – it’s always a pleasure meeting new human gems.
Thanks to Pere Alcober and Juan Porcar for presenting me, it was a pleasure and an honour to share the table with you both. I value you support and your friendship greatly.
Thanks to Siscu and my wonderful team – you are true gems, and I never tire of saying it.
Today is a day without presentations; instead I have several meetings in Barcelona with Siscu and later with Vilaprat – followed by a run in Barcelona.
Tomorrow we present in Tarragona and on Friday in Girona…
¡Kilometrate!
Álex, cómo decirte que el placer es nuestro!
Las gracias te las tenemos que dar a ti, por ser como eres, pon enseñarnos todo ese potencial que sólo tú posees y que tan bien sabes transmitirnos; por descubrirnos un mundo muy poco valorado, pero que requiere tantos esfuerzos; por esa sonrisa que siempre tienes para todos y la paz que desprendes; por enseñarnos tantos valores imprescindibles; por abrirnos un mundo de posibilidades que seguramente desconocemos…podría seguir, pero entonces no acabaría nunca.
GRACIAS POR SER ASÍ
Besos / φιλάκια πολλά
Oh Sara, gracias, me dejas emocionada! Y sin palabras – que pocas veces pasa a mi…
Ha sido un plcer conocerte, y seguro que no será la última vez.
Muchos abrazo para ti y para tus amigos, y calro un montón de alegría buena tambien…A Kilometrar!
A mi sí que me emocionaron tus palabras, sobre todo cuando nos explicaste tu “Camino de Santiago”! Yo lo he hecho con mi madre, por etapas y año tras año, pero desde Roncesvalles. En más de una ocasión se me había pasado por la cabeza abandonar en medio de la etapa por agotamiento, ampollas, dolor (36º por los campos de Castilla, con 13kg en la espalda, sin prácticamente agua) pero ver a mi madre al lado, con su coraje, recordándome todo lo que llevábamos recorrido, los buenos momentos vividos durante el trayecto, con pensamientos positivos en todo momento… fue lo que me llevó a acabar todas y cada una de las etapas. Como ella, tú, con tus consejos y bellísimas palabras del pasado martes, que me animaron a continuar por esos caminos (no sólo de asfalto o tierra) que en algún momento emprendí y que abandoné por el atajo más corto, por no creer en mi misma. Espero que estas lecciones nos sirvan a todos!
Que te vaya muy bien en Tarragona esta tarde. Un fuerte abrazo… y a Kilometrar.