Ayer Siscu y yo pasamos una tarde estupendo con ASEM Catalunya. Estaba muy contenta de entregar el dinero de las camisetas (quedan algunas mas para vender que se hará entre ellos y nosotros). Estos días, las ayudas económicas son muy reducidos y todo el ayuda es mas que bienvenido y necesario. Juan Jose Moro, el presidente de ASEM me dijo hoy que aunque el dinero es muy necesario y ayuda un montón, son otras cosas las que dan valor a la vida. Estoy completamente de acuerda con el, y sobre estas cosas hablé ayer en la charla. Hablé no de los desafíos – ya habrá mas charlas y libros para esto, hablé de unos de los valores que he aprendido durante los desafíos, y como me han ayudado en la vida.

Hable de la importancia de un actitud positivo, de saber y valorar lo que tenemos, no lo que nos falta, y claro, hablé de la importancia de compartir. Fue una tarde compartido con un grupo de gente que saben que significa la lucha diaria, y saben que significa mirar con alegría lo que tienen, no lo que les falta.

En una sociedad donde la respuesta para el saludo “Hola, ¿Qué tal?” es mas veces que no una queja sobre lo que esta mal en la vida, fue como una respira fresca ayer, de compartir unas horas con un grupo de gente tan alegre y tan positivo.

Los que tienen mas, se quejan mas – dije yo, y tenemos que valorar, saborear y vivir a lo máximo, cada momento que tenemos, dije. Lo que veía en frente de mi, en las caras de los miembros de ASEM, y sus familiares fue acuerdo sonriente, saben que tienen y el valor de todo lo que tienen. Sería un buen lección para todos pasar tiempo con gente tan lleno y tan rico en el optimismo y el espirito de la vida.

Como fue el 1er Día Nacional de las Enfermedades Neuromusculares, después de las charlas de Juanjo, de Gemma Mumbrú (regidora del distrito de Sant Andreu) y mío, leímos junto con algunos miembros, el manifiesto. Con ese acto, inauguramos un exhibición de pintura, manualidades y fotos de los varios actividades de ASEM, que se quedará en Can Fabra durante unos 10 días. Habrán, durante esos días otros actos organizado por ASEM.

Allí con nuestro familia de ASEM, Siscu y yo, junto con OZ, JMA Y V, celebramos ese día tan importante y respiramos optimismo que radiaba ese grupo.

Tenemos que dejar de intentar seguir los demás. Conformidad no nos llegara a ningún éxito, ni nos ayudara en llenar nuestro espirito, nos vaciará – un poco mas cada día. Son nuestros diferencias los que nos llenarán si aprendemos de dejarles lucir. La familia de ASEM Catalunya sabe lucir y celebra sus diferencias.

¡A Kilometrar!

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